viernes, 31 de mayo de 2013




Quiero dedicar este blog a hablar de terapias de sanación a través de nuestro campo de energía.

¿Cuántas veces  nos sentimos sin vitalidad, con dolores, malestar, nerviosismo, estrés…?

Pues bien, gracias a las terapias energéticas lograremos una mayor vitalidad, armonía y paz.  

El propósito es liberar la energía bloqueada en nuestro cuerpo para poder conseguir el equilibrio físico, mental, emocional y espiritual.

Comenzaré hablando de REIKI, terapia que he recibido y recomiendo.


¿Qué es REIKI?

El término "Reiki" es una palabra japonesa. REI significa universal o sin límites, y se refiere a el Universo que nos rodea. KI significa energía vital, lo que fluye en todo ser viviente.

Reiki es una técnica práctica y eficaz para sanar enfermedades, eliminar el estrés, relajarte y sentirte feliz mediante la canalización de "energía universal", una energía que nos rodea y a la que cualquier persona puede tener acceso después de hacer un curso de Reiki.

Originalmente se desarrolló en Japón como una técnica terapéutica para uso clínico, pero desde su introducción en occidente millones de personas han aprendido a utilizarlo para su propia salud y bienestar físico, mental y emocional.

Reiki es parte de la gama de terapias energéticas, como la Acupuntura o el Shiatsu. Su aprendizaje es fácil  ya que no se necesita un "don" especial. Los cursos te enseñan todo lo que necesitas para aplicar Reiki a los demás y también sobre uno mismo.

Hoy en día es la terapia complementaria más usada en hospitales y está reconocida como terapia alternativa por la Organización Mundial de la Salud.

Puedes usar Reiki como un método terapéutico para sanar dolencias o como parte de tu crecimiento personal y espiritual, ya que con su uso habitual te ayuda a "descubrir quién eres".


La técnica consiste en la imposición de manos en unos puntos determinados del cuerpo que van asociados con los chakras, puntos energéticos principales que veremos más adelante.

Una sesión de Reiki suele durar alrededor de una hora y el paciente permanecerá tumbado en una camilla, vestido pero despojado de zapatos y objetos. El precio oscila entre 20 y 40 €  por sesión, dependiendo de su duración.


En mi caso os puedo contar que durante las pocas sesiones que he recibido la sensación que he experimentado es de relajación profunda. Los días posteriores a las sesiones he sentido alivio de dolores, aumento de energía y ánimo. Es como si te quitaran un peso de encima, te sientes ¡ligera como una pluma!

IMPORTANTE: Esta terapia es un complemento y jamás ha de sustituir a un tratamiento, consejo o prescripción de un médico o psicólogo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario